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IBLNEWS
Jueves, 14 marzo 2002
JOSÉ ANTONIO ARCOS
movimiento
económico postautista
El economista 'brujo' desmiente la recuperación de Greenspan
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Los nuevos
movimientos económicos, como el "movimiento de Cambridge" o el
"movimiento económico postautista", tras el 11-S, han
multiplicado sus acciones contra "las elites políticas que dirigen la
globalización hacia sus intereses". Muchos de estos llamados
"pensadores de economía política crítica" dudan de que la CIA no
supiese previamente lo que después ocurriría en el WTC y uno de ellos, el
español Diego Guerrero, conocido como el "economista brujo",
anticipó en dos ocasiones lo que sucedió el fatídico 11 de septiembre de
2001. Ahora desmiente la anunciada recuperación económica de Alan
Greenspan.
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Jueves, 14 marzo 2002
JOSÉ
ANTONIO ARCOS, IBLNEWS
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Diego Guerrero, miembro
de la Sociedad de Economistas políticos latinoamericanos, es experto en
"La nueva economía política de la globalización", como titula
asimismo, a una de sus últimas obras. El 6 de abril de 2000 repartieron uno
de sus documentos en el Salón de Grados de la Facultad de Económicas de la
Universidad Complutense de Madrid (España), que contenía el siguiente
párrafo:
"La única salida posible de esta
situación de doble crisis (sobreacumulación de capital productivo;
hipertrofia de la burbuja financiera) es la destrucción de capital. La
última crisis de sobreacumulación condujo a la 2ª guerra mundial, que, al
destruir mano de obra "sobrante" y grandes masas de
"capital" físico, puso las bases (terribles, pero bases) de la
nueva onda expansiva del capitalismo mundial. De la depresión de los
últimos 25/30 años aún no hemos salido. En mi opinión, la salida está
cercana y se producirá por un estallido que tendrá consecuencias
desastrosas para la situación económica y social de la población mundial.
La generación joven actual, aniñada y completamente ajena a la realidad de
los hechos, en parte porque sus profesores y maîtres à penser (et à
ignorer), están igual de infantilizados en lo intelectual, no tiene la
menor idea de lo que por desgracia le espera. Las ilusiones de quienes
creen que lo malo de la historia ya pertenece al pasado van a estallar tan
estrepitosamente como la economía, y no porque la salida de esta onda
depresiva tenga que conducir necesariamente a la 3ª guerra mundial (aunque
tampoco lo descarto). Hay otras muchas formas de destruir capital, sin
necesidad de tirar bombas (el movimiento de las bolsas puede destruir
capital con la misma rapidez que una bomba atómica). Así que id preparando
las armas, queridos colegas, porque nos queda mucho por sufrir. Como no me
da miedo equivocarme, lo digo aquí. Tras el análisis de la situación, mi
pronóstico sólo puede ser que la catástrofe está a la vuelta de la esquina.
Pero que nadie se haga ilusiones, porque la bocacalle que hay después de
esa esquina puede reconducirnos a más capitalismo. El páramo de reflexión
sobre lo que está pasando va a coger tan desprevenidos a casi todos que el
capitalismo puede ser capaz de fabricar una nueva vía, que será sin duda
otro callejón sin salida, pero que tendremos que andar hasta el final si no
nos sublevamos. Los cambios ideológicos que se avecinan, consecuencia de
cambios sociales, económicos y políticos que están a punto de pasar, van a
dar mucho trabajo a los historiadores e ideólogos de las próximas
décadas".
Más tarde en la presentación en el
Ateneo de Madrid del libro de Peter Gowan: "La apuesta por la
globalización", el 12-I-2001, frente a Guillermo de la Dehesa, Diego
Guerrero se ganó su fama de "economista brujo" cuando expuso una
idea que luego desarrolló así en un escrito presentado en la Universidad de
Alicante (28-II-01):
"¿Hace falta un comentario
final? Pues ahí va: ¿no serán los dos últimos y sonados episodios (...) los
últimos y desesperados intentos para lograr que el avión/burbuja del
contemporáneo remake de este Aterriza como puedas financiero tome tierra de
una vez, aunque sea sin ruedas y sin frenos, para poner fin a la terrible y
espantosa pesadilla que deben de sufrir cada noche los varios santos
Greenspans repartidos por el mundo, en la que se retransmite en directo, y
por todos los canales de televisión, la explosión en pleno vuelo de la
aeronave insignia de la bandera americana del capitalismo?".
¿Sabía la CIA lo que iba a ocurrir el
11-S?
Diego Guerrero, en exclusiva a IBLNEWS,
pone en tela de juicio que "solo" Bin Laden y Al Qaeda estuviesen
detrás de los atentados del WTC: "Durante décadas el gobierno
norteamericano negó que el bombardeo de Pearl Harbour fuese conocido con
anterioridad. Sin embargo, hoy en día es vox populi que la CIA lo
sabía y que sirvió como excusa para entrar en la II Guerra Mundial. El 11-S
es una cosa extraña y pasará mucho tiempo hasta saber quién estuvo
detrás".
En Francia al final de 2001 se publicó
el polémico "L'Empire en Guerre" ("El Imperio en Guerra. El
mundo después del 11 de septiembre") en el que hay tesis que sugieren
que la CIA podía conocer lo ocurrido hace seis meses. Entre los distintos
pensadores que aparecen en esta obra están Rémy Herrera, Georges Labica,
Noam Chomsky, Samir Amin, Eduardo Galeano o José Saramago.
El también heterodoxo economista
brasileño Paulo Nakatani va más allá y asegura que, a partir de ahora,
Estados Unidos amenaza "envolver a todas las fuerzas de oposición y
resistencia al modo de producción capitalista". Nakatani apremia a la
necesidad de buscar una nueva vía ante el temor de que la segunda fase de
la guerra contra el terrorismo anunciada por George Bush, se convierta en
una tercera guerra mundial.
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Diego Guerrero versus Alan Greenspan
Estos últimos días Alan Greenspan,
presidente de la Reserva Federal, aseguró que la recesión en la economía
norteamericna había terminado. "Los indicios preliminares sugieren que
la fase de contracción en el ciclo de negocios ha llegado a su fin",
dice.
"Por primera vez en 18 meses subió
el índice de la actividad manufacturera y se reforzó el gasto de los
consumidores en enero. Después de una reducción del 1,3% en el tercer
trimestre del año pasado, la primera desde 1991, la economía de EE.UU. tuvo
un crecimiento del 1,4% entre octubre y diciembre", aseveró Greenspan.
Sin embargo, esta valoración es muy
distinta a la que hace Diego Guerrero, que considera los datos del PIB de
EE.UU. en el cuarto trimestre (+1.4% frente al -1.3% del tercer trimestre)
están artificialmente "mejorados". "Eso se ve cuando se
analiza cómo se han comportado los componentes de la demanda (y éstos datos
los proporciona el propio BEA (Bureau of Economic Analysis, el último hace
20 días): estancamiento del consumo familiar, caída enorme de la inversión
empresarial (-30%), caída leve de las exportaciones netas, y subidón de las
compras gubernamentales (10%), especialmente las militares (40%).",
explica Guerrero.
Para el economista heterodoxo español en
realidad las empresas estadounidenses "siguen completamente deprimidas
y con sus planes de expansión por los suelos (o más abajo), y el gobierno
parece decidido a tirar sólo adelante por la vía militar. Ya hablan de
bombas nucleares y de la lista de los países enemigos en los que tirar esas
bombas. Evidentemente, no quieren una sangría de muertos de casa que
conviertan la cosa en un nuveo Vietnam, pero tienen que encontrar una
fórmula para sacar a la economía del enorme bache en el que está, y
apuestan por la expansión militar desaforada", sentencia.
Nuevos movimientos económicos en la
Red frente a los ortodoxos
Hace sólo unas semanas se han celebrado
en Valladolid (España) las VIII Jornadas de Economía Crítica con el
espíritu de "hacer que la economía esté al servicio de, y no
sea dueña de". Estas jornadas, que se celebran en España cada
dos años desde 1987, buscan una finalidad "humana" para la
economía y tienen como objetivo hacer un debate público sobre las formas de
intervención social frente a los retos y desigualdades que plantea el
proceso de globalización.
Estas Jornadas han podido seguirse a
través de la Red y desde esta semana en su web oficial se puede acceder a las
conclusiones finales, opinar sobre ellas y firmar el documento que se
ha acordado. Estos grupos de economistas han denunciado en distintas
ocasiones la supuesta censura y marginación que sufren en las publicaciones
oficiales y, por eso, usan la libertad 'online' para propagar sus
actividades.
Estos trabajos se engloban en el llamado
"movimiento postautista" formado por estudiantes y profesores que
protestan por la falta de pluralidad existente en la enseñanza de la
Economía y "por la postura miope de los actuales economistas ortodoxos
que dirijen las directrices de la economía mundial".
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El término postautista deriva de la idea
de ir más allá de la visión que tienen los autistas, que se encarnarían, según
los pensadores de este movimiento, en los economistas convencionales y
ortodoxos. Este movimiento coincide con el "movimiento Cambridge" o
con la "Propuesta de Kansas City" en que estos economistas sólo
consideran aquello que está dentro de su modelo matemático, cerrado e
inflexible. "Por eso, son economistas autistas, porque tienen
dificultades para relacionarse con el exterior y para saber lo que realmente
pasa", explica Diego Guerrero.
'Aprender economía para no dejarse
engañar por los economistas'
"Hay que aprender economía para no
dejarse engañar por los economistas", dice Guerrero parafraseando a Joan
Robinson. Después añade: "Vivimos en un escándalo continuo porque muchos
economistas por el cargo que ocupan dicen cosas que ni ellos se creen. Por
ejemplo, todos los pronósticos de la Bolsa son positivos y si baja, dicen que
va a terminar y que se va a volver a comprar. Los períodos de crisis ni se
mencionan. Llevamos, durante los dos últimos años, una media mundial de
bajada bursátil superior al 40%, lo que significa que ha desaparecido en ese
porcentaje el valor de las empresas en términos de mercado, pero no interesa
decirlo".
Otro ejemplo de lo que no se dice es el
siguiente. Cada década, desde los años cincuenta hasta hoy en día, la media
de desempleo de los 30 países más ricos del mundo, según los datos que
proporciona la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) ha
ido creciendo.
"Hoy en día, no se explica lo que
ocurre en el mundo real, se pinta todo de color de rosa, se embellece y se
quiere hacer pensar que el mercado lo soluciona todo, pero no es así porque
la gente se sigue muriendo y las guerras no cesan", dice Guerrero.
"Lo que enseñan los manuales de economía equivale a afirmar que el sol
da vueltas alrededor de la Tierra", comenta Guerrero, parafraseando esta
vez a Lester Thurow.
Los ricos más ricos, los pobres más
pobres
El brasileño Paulo Nakatani no cree que la
actual guerra proclamada por Estados Unidos consiga crear las condiciones
para un largo ciclo de acumulación porque las nuevas tecnologías tienen cada
vez un ciclo industrial más corto. "Incluso, aceptando que esta guerra
llegase a envolver a todas las naciones del planeta y que lleguese a destruir
grandes parcelas del capital fijo ya instalado, la reconstitución del mismo
debería darse sobre nuevas bases tecnológicas, cuyo ciclo industrial es mucho
más corto y, por mayor que fuese la tasa de explotación del trabajo, no
revertiría en la tasa de ganancia", dice.
Pataki además asegura que la crisis
económica se acentuará en los países desarrollados. "La forma actual de
guerra no desempeñará el mismo papel que tuvo en las guerras mundiales. No
destruirá capital ni fuerza de trabajo en escala suficiente para un largo
ciclo de reconstrucción capitalista", asegura.
El desarrollo científico y tecnológico, en
el contexto de la mundialización del capital, tiende a concentrarse cada vez
más en los países desarrollados, según Pataki. "Los países
subdesarrollados sufren una reprimarización de sus economías, con un empobrecimiento
cada vez mayor de su población. De esta forma, el nuevo impulso al desarrollo
científico y tecnológico será aún más excluyente".
Diego Guerrero comparte esta postura:
"El sistema capitalista es el de la desigualdad creciente, no sólo a
nivel interno de cada país, sino a nivel mundial. Es una constante en la que
los ricos son cada vez más ricos y los pobres cada vez más pobres".
De la euforia económica optimista al
hundimiento pesimista
Guerrero explica que la revolución del sector
tecnológico llevó a la actual crisis porque el gasto económico que se
esperaba para las actividades de la nueva economía no existe. "Sobra
capacidad. Por ejemplo, la gente no se gasta la misma cantidad de dinero en
componentes informáticos que en los de un coche", comenta.
Según él muchas empresas de telefonía
consideran ahora que en su momento, cuando salieron a concurso las
distintas licencias, invirtieron en exceso y, así lo comprueban en el
descenso de su cotización en Bolsa.
"Cuando todo va bien los
capitalistas se animan, cada uno de ellos sabe que tiene que ser el primero
y comienzan una pelea, una carrera que hace que se invierta más deprisa de
la cuenta por miedo a quedarse atrás. Durante mucho tiempo esto no se nota,
es la fase optimista en la que el optimismo se contagia a todos los poros
de la economía; pero ,al mismo tiempo, esto crea las bases para que después
el optimismo se transforme en pesimismo. Entonces todos comprenden que han
invertido demasiado", advierte Guerrero.
El sector tecnológico se recuperará
con las fusiones empresariales
Aunque Guerrero afirma que la capacidad
de producción excede a la capacidad de compra, lo que ha traído un descenso
de la inversión con un aumento del desempleo y una caída del consumo;
asegura que la crisis del sector tecnológico está autocorrigiéndose.
"La salida está en las fusiones y asociaciones empresariales. La de
Hewlett-Packard y Compaq es una más de las que vendrán en el futuro",
augura.
El 19 y 20 de marzo la operación de
fusión entre el gigante informático y el segundo fabricante de ordenadores
de Estados Unidos será sometida a votación entre los accionistas de las dos
compañías.
Sin embargo, el mapa completo que dibuja
Guerrero no es nada halagüeño. Parte de la base de que sólo el 20% de la
población mundial es responsable del 80% del consumo: "Faltan medios
de producción, faltan inversiones en Ciencia y Tecnología, faltan
Universidades. Hay que sustituir el sistema de guerra de todos contra todos
por otro de cooperación, pero no se hace porque va en contra de los
interesas creados".
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